Recientemente he estado reflexionando sobre mis decisiones de consumo, cómo hacer para que me cueste menos esfuerzo y tiempo "comprar cosas" al mismo tiempo que no desperdicio dinero, y concentrarme en hacer las cosas. La conclusión más importante sigue siendo - "El mayor problema de las cosas caras es que son caras, las cosas baratas tienen problemas además de ser baratas."

Esta frase se aplica a al menos tres cuartas partes de las decisiones de consumo en la vida... pero primero excluyamos esa cuarta parte que no se aplica: productos con procesos y materiales consistentes pero con una prima de marca excesiva (como camisetas), funciones simples y situaciones de demanda únicas o extremadamente escasas (quizás un paraguas?).

Sin embargo, en la mayoría de los casos, especialmente en bienes duraderos y herramientas de productividad, comprar algo más caro generalmente será más profesional, más confiable, más duradero, ofrecerá una mejor experiencia diaria y no requerirá gastar mucho tiempo comparando al tomar decisiones, además de no tener que preocuparse por daños o insatisfacción, lo que a su vez podría llevar a gastar más tiempo eligiendo nuevamente. Considerando el tiempo, el costo total de propiedad a largo plazo puede ser incluso más bajo.